Los perros se acaban rindiendo a su instinto al final y acaban preocupándose por el devenir del nuevo miembro de la familia como miembro del grupo.
Pero los a los gatos les dan igual los grupos, los instintos protectores o los nuevos miembros de la familia, y muestran su desdén sin ningún tipo de reparo.
El siguiente vídeo muestra una recopilación de gatos atacando a los pequeños humanos, bueno, más bien molestándoles un poco y demostrar así quién manda: