Anuncio brutalmente honesto

Si la publicidad consiste en engañar al consumidor será por algo. Pero de vez en cuando nos sorprende un anunciante por su brutal honestidad. No sabemos si el anuncio es efectivo, si ha conseguido vender mucho o no, pero lo que sí a conseguido es llamar la atención por su originalidad y atrevimiento:

El anuncio, amateur, consiste en vender casas prefabricadas. Y el dueño dice cosas como “no es la casa de tus sueños, es simplemente una cada prefabricada, con goteras y manchas que tapamos”. Presenta a sus trabajadores. Luego dice: “…el novio de mi mujer me rompió la mandíbula con un poste de una verja, así que si no me compras una casa prefabricada no vas a herir mis sentimientos”. “Así que ven a mi negocio a comprarme una caravana, o no, me da igual”.