A los que nos gusta David Lynch podemos comprender que esté sumergudo en cosas como conciencia, creatividad y cerebro, después de todo sus películas tienen más de percepción que de lógica.
Pero de vez en cuando también aparecen noticas raras como esta de hace tiempo Paz por medio del vuelo yóguico y que no sabes muy bien con qué quedarte.
Algo así le ha vuelto a suceder en una conferencia en Berlin. En la presentación, que hablaba de la meditación o el conicimiento interior para hacernos mejores, invitó a un “amigo” que nada más abrir la boca empezó:
¡Queremos una alemania invencible! ¡Alemaniainvencible!
En alemán, idioma que no entiende Lynch. En seguida el público empezó a preocuparse y a preguntar, “¿Qué quieres decir? Hitler también quería una Alemania invencible”, pero el sujeto no paraba de repetir lo mismo. Viendo el vídeo te das cuenta de que el hombre no coordina demasiado bien, y aunque quizá quiera decir algo relacionado con el tema no parece capaz de comunicarlo.