Carta de amor de un físico es la carta de amor que escribiría un físico a su amada.
Para mi xorritín de electrones:
Me gustaría poder mirar cada día tus ojos cristalinos de indice de refracción casi inapreciable. Me encanta andar kontigo por la kalle a velocidad constante, mientras nuestras manos entrelazadas realizan un péndulo simple anarmónico. Cuando nos tiramos por la colina de cesped en la uni, siento como nuestra energía potencial va decreciendo y nuestra cinética aumentando asta fundirnos en un beso que produce un calor inmenso completando nuestra ecuación de la conservación. Es cierto que hay a veces que parecemos polos opuestos y creemos que todo gira alrededor nuestro barriendo areas iguales en tiempos iguales, pero eso termina cuando vienes, porque mi fuerza de atracción, frente a la tuya, es más bien despreciable. Adoro levantarte entre mis brazos de tal forma que el centro de gravedad de nuestro conjunto se encuentre en mi…. sólido rígido.
Te acuerdas de aquella noche en mi casa? Ese día compre condones estriados mmm… que dulce material, me sentía como un superconductor en un campo magnético… Primero introduje mi… sólido rígido… haciendo presión como si de un muelle se tratara, entre tus susurros se podía escuchar: “adoro el coeficiente de rozamiento”, despues comence a moverme armónicamente despacio, mientras tu gemías y me pedías porfavor que querías que aumentara la amplitud, kerias amplitud eh? jeje, yo no solo la aumente, sino ke reduje el periodo, y aquello cada vez parecia más anarmónico, más inestable, la velocidad tendia a infinito, el aire cada vez era más cargado (por akello de la ley de los gases, que si se agitan…) puffff… al final todo terminó en dos ondas sonoras perfectamente acopladas de niveles de dB maximos de audición… me dijiste: “casi haces el límite a infinito realidad” y yo contesté: “es realidad, todavia no te has dado cuenta de que mi solido rígido… sigue rígido”…
Lo que viene después es incompresible a nivel científico… pero a estos niveles de la vida ya te darás cuenta de que el amor no es ciencia amig@, solo dos mentes que entienden el mismo lenguaje incomprensible para los demás e incapaz de demostrar.
Un poco friki pero entretenido.