Son 18 pequeños trucos para enseñarle a tu cuerpo. Por ejemplo:
- ¡Supera tus urgencias más primarias!
¿Necesitas orinar? ¿No hay retretes por los alrededores? Ten una fantasía con Jessica Simpson. Pensar en el sexo causa preocupación en el cerebro, de modo que no te sientes tan incómodo, comenta el doctor en medicina Larry Lipshultz, jefe de urología en el Colegio de Medicina Baylor. Para obtener mejores resultados, inténtese visualizar mentalmente el video de “These Boots Are Made for Walking” de la Simpson. - ¡Despeja tu congestionada nariz!
Olvídate del utabon. Una forma más rápida y barata de aliviar la presión en tus senos es la de empujar con fuerza y por turnos la lengua contra el cielo de la boca, y luego presionar con un dedo entre las cejas. Esto provoca que el hueso vómer, que recorre el conducto nasal hacia la boca, se mueva hacia delante y hacia atrás, comenta Lisa De Stefano, doctora en osteopatía y profesora asistente en el Colegio Osteopático de la Universidad Estatal de Michigan. El movimiento disminuye la congestión; después de 20 segundos sentirás que tus senos empiezan a drenarse. - ¡Cura tu dolor de muelas sin abrir la boca!
Simplemente frota con hielo la palma de tu mano, hazlo sobre el área en forma de V que hay entre el pulgar y el dedo índice. Un estudio canadiense descubrió que esta técnica reducía el dolor de muelas casi un 50% en comparación a los que no usaban hielo. Los nervios ubicados en la base de esa V estimulan un área del cerebro que bloquea las señales del dolor que llegan desde la cara y manos.